lunes, 7 de junio de 2010

REMOLINOS DE VIENTO

Veo sus labios haciendo una larga o, abriéndose en una a y pienso en la posibilidad de acercarme y besarlo. Mientras él habla sobre la vulnerabilidad y derechos de los homosexuales. Detesto sus conversaciones políticas gay.


Sumerjo la mano en el bolsillo de mi pantalón negro,
El que tiene rotas las rodillas y esta deslavado en las nalgas,
Con los dedos sacó el celular y agradezco que existan estas cosas tecnológicas.
Finjo que tengo una llamada y salgo de la habitación.

Me siento en una banca de la calle y volteo hacía las ramas juguetonas de un árbol que toca mi espalda.
-Me siento triste- le platico angustiado.
-Lo que pasa es que no escuchas al viento- me responde.




Es entonces cuando abro mi oído y siento como los remolinos de viento comienzan a introducirse suavemente a mi cuerpo. Por primera vez siento su espíritu y el poder de su mensaje que sin necesidad de palabras me murmura.

En los días de viento mando a mis emisarios, ellos llevan como misión el comunicar la historia sobre el origen, para recordarles lo que son más allá del tiempo y la materia, con el lenguaje etéreo del espíritu y el poder de la creatividad primaria. Fuerza y amor.






Cuando un pajaro pasa volando por encima de tu cabeza, cuando una mariposa descansa al lado tuyo, cuando la abeja se posa sobre tu hombro o la mosca se mete a tu plato, es el movimiento de sus alas las que irradian el sentido y la intención expresiva.




Eres el rey de tu vida
Rey de tu cuerpo
Gobernante real e irreal
Maestro y aprendiz
Amo y esclavo
Diosa que nutre
Ser interdimensional


Estaba escuchando con sorpresa cuando suena está mierda de teléfono con la operadora recordándome que debo pagar la cuenta. ¡Vete al carajo celular! Lo aviento a varios metros de distancia y cae en varios pedazos ¿cómo los hacen ahora que parecen de cristal? Corriendo recojo el aparato, arrepentido pero contento. Regreso a la reunión cagándome de risa. La vida es extraña.

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